Hoy os voy a presentar una receta simplísima, pero muy rica. Una receta que os dará tiempo a realizar otros preparativos de cualquier menú mientras se esta cocinando.
No me esperaba que la textura final fuese tan crujiente, además evitamos la fritura, aligerando el plato.
Este plato puedes hacerlo con otra parte del pollo, pero deberás aumentar el tiempo de horneado y disminuir los grados de temperatura.
Sin más preámbulos, os dejo la receta.
Ingredientes:
- 12 Alítas de pollo
- Harina
- Pan rallado
- 3 Huevos
- Leche
- Ajo en polvo
- Pimentón dulce o picante ( al gusto)
- Pimienta recién molida
Comenzamos separando las dos partes del ala, una la que parece una "patita pequeña", y la otra el resto, y sal-pimentamos.
Preparamos tres recipientes, en uno ponemos la harina con el ajo en polvo, el pimentón y la pimienta molida, y mezclamos bien. En otro los huevos con la leche, los batimos. Y en el último el pan rallado.
Ahora vamos a realizar el rebozado pasando los trozos de pollo primero por el recipiente de harina, sacudiendo para quitar el exceso, luego por el batido de leche y huevo, y por último por el pan rallado.
Y los vamos colocando en una bandeja apta para horno.
Introduciremos en el horno previamente calentado a 200º durante 20 minutos, pasado este tiempo le daremos la vuelta y dejaremos hasta que veamos el rebozado tostado.
Una vez horneadas yo las serví junto a tres salsas, barbacoa, tomate con orégano y pimienta, y una mayonesa de ajo con salsa Worcestershire.
Que deciros, como las pipas, te pones a comer y no te enteras de cuantas te comes.
Espero que os guste esta receta.
NOS VEMOS!!!!
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